Esta semana se conmemora el Día de la lucha contra el Cáncer de Ovario, la patología ginecológica de mayor mortalidad y que es curable solo cuando se detecta y se trata a tiempo. Entrevista con el doctor Edwin Hoyos Usta, jefe del departamento de Ginecología Oncológica del Instituto de Cancerología de Sucre, IPS de la red de servicios de Coosalud.
El cáncer de ovario se puede definir como un crecimiento de células que se forman en los ovarios y se multiplican rápidamente, invadiendo y destruyendo tejidos sanos del cuerpo, creando masas conocidas como tumores, que continúan viviendo aún después de que las células sanas perecen.
Este tipo de cáncer resulta ser todo un reto para la comunidad médica, dado que no suele ser detectado a tiempo, hasta que se extiende a la pelvis y el vientre, cuando es más difícil de tratar y su porcentaje de mortalidad es alto, debido a que en sus primeras etapas sus síntomas son poco notorios y se atribuyen a afecciones más comunes.
Inflamación abdominal, pérdida de peso, fatiga, estreñimiento, dolor de espalda, necesidad frecuente de orinar y sensación de saciedad rápida al consumir alimentos, son algunas de las señales de esta enfermedad potencialmente mortal, de aparición y progresión silenciosa y que afecta principalmente a mujeres mayores de 50 años.
Edwin Hoyos Usta, jefe del departamento de Ginecología Oncológica del Instituto de Cancerología de Sucre, IPS de la red de servicios de Coosalud, habla sobre este tipo de cáncer que conmemora el día mundial de lucha en su contra, el 8 de mayo.
¿Es cierto que la menarquia, la menopausia y el no haber tenido un embarazo pueden incidir en el padecimiento de cáncer de ovario?
La menarquia temprana y la nuliparidad se consideran factores de riesgo, pero no son determinantes. La menopausia coincide con el grupo etario en el que se presenta con mayor frecuencia el cáncer de ovario. Pueden existir otros factores de riesgo más determinantes como exposición a sustancias químicas en el medio ambiente o alimentación, pero aún no identificadas.
¿Hay síntomas puedan encender las alarmas?
Desafortunadamente el 80% de los cánceres de ovario se detectan tardíamente, debido a que su crecimiento es silencioso o asintomático. Los síntomas precoces muchas veces son confundidos con trastornos digestivos, el dolor en la parte baja del abdomen o en la pelvis son muy subjetivos. Solo hay alarma cuando se nota crecimiento abdominal exagerado o cuando hay una tumoración palpable.
Es decir ¿no hay ninguna estrategia que permita trabajar desde la prevención?
No existe actualmente ninguna estrategia que nos permita prevenir el cáncer de ovario, sin embargo, la consulta rutinaria anual por ginecología, con ayuda de la ecografía transvaginal puede ayudar a detectar cambios tempranos en los ovarios que nos permitan sospechar la enfermedad.
La ooforectomía profiláctica, cirugía para extirpar los ovarios sanos, puede prevenir el cáncer de ovario en pacientes con mutaciones genéticas, que hayan sido detectadas por estudios genéticos indicados por historia de cáncer de mama y ovario de línea familiar.
¿Cuál es la expectativa de vida frente a esta enfermedad?
El pronóstico de la enfermedad depende de varios factores: el momento en que se diagnostica, es decir, la etapa de la enfermedad al momento de hacer el diagnóstico. Si la enfermedad ha salido de los ovarios y ha producido siembras en otras estructuras, el pronóstico se ensombrece. Recibir una cirugía adecuada, realizada por un experto en el tema, que logre extirpar toda la enfermedad visible es crucial.
Por último, la sensibilidad de las células tumorales a los medicamentos usados en quimioterapia. Actualmente es impredecible, hay casos en que la respuesta no es significativa y la enfermedad sigue su curso, en otros que la respuesta es temporal, presentando recaídas a corto plazo y en pocos casos se consigue una respuesta definitiva, con curación de la paciente.
¿Cómo es el manejo que se da desde Coosalud a pacientes de este tipo?
Coosalud, cuenta con la integralidad según la pertinencia del caso y las puertas de entrada definidas por la norma, capaces de sospechar y confirmar el diagnóstico de las patologías de interés prioritario como el Cáncer.
El programa de cáncer en Coosalud comprende cuatro líneas de trabajo específicas:
La primera se refiere a la promoción de la salud y protección específica, con estrategias educativas para funcionarios de la salud y comunicaciones masivas para la población, dirigidas a disminuir el consumo de tabaco, aumentar el consumo de frutas y verduras, la actividad física y reforzar el uso de la vacuna contra el Virus del papiloma humano (VPH).
La segunda línea se refiere a detección temprana de la enfermedad atendiendo y canalizando adecuadamente a los pacientes que presentan síntomas incipientes de la enfermedad o mediante la tamización.
La tercera línea es la atención, recuperación y superación de los daños ocasionados por el cáncer, que incluye tratamientos largos y complejos que debe realizarse en forma precisa e integral durante todas las fases de la enfermedad con el fin de lograr curación, prolongar la vida útil y mejorar calidad de vida del paciente.
La cuarta línea está enfocada en el mejoramiento de la calidad de vida de pacientes y sobrevivientes con cáncer con cuidados paliativos.
Expertos internacionales
Según la Clínica Mayo, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, que tiene su sede central y en Rochester (Estados Unidos), existen factores que pueden aumentar el riesgo de padecer cáncer de ovario.
Entre ellos se encuentran la edad avanzada, alteraciones genéticas hereditarias que también aumentan el riesgo de cáncer mamario, antecedentes familiares de cáncer de ovario, sobrepeso u obesidad, terapia de reemplazo hormonal postmenopáusica, endometriosis, edad en la que comenzó y terminó la menstruación y no haber tenido hijos.